Al desarrollar un plan integral de riesgos es importante mantener siempre claro los conceptos inherentes a riesgos como lo son la prevención y la mitigación. El propósito de la gestión de riesgos es identificar posibles riesgos, reducir o dividir los riesgos, proporcionar una base racional para la toma de decisiones en relación con todos los riesgos y desarrollar una planificación adecuada.